muchas mamás nos ha pasado. Estás en la tienda con tu hijo y vio un juguete que le gustó pero que no le vas a comprar. De repente, te encuentras con que tu niño ha cambiado completamente y ahora está gritando, llorando y en medio de una pataleta total. Te sientes muy avergonzada por tal escena y lo único que quisieras hacer es desparecerte en medio de las miradas de las otras personas.
Los berrinches o pataletas son comunes en los niños de 2 a 4 años y aunque son muy molestosos, son parte de su desarrollo. Además, las rabietas o perretas son muy buenas oportunidades para nosotras enseñarles a nuestros hijos, la manera correcta de expresarse y comportarse.
Tenemos algunos consejos para que sepas qué hacer y qué no hacer al encontrarte en medio de uno de estos episodios. Pero primero, averigüemos qué es lo que causa estas reacciones de nuestros niños para comprenderlos un poco más.
Las causas
Los berrinches en los niños usualmente se deben a la necesidad de independencia y la frustración de no saber expresar con claridad sus sentimientos y necesidades. Puede tratarse de necesidades físicas como cansancio o hambre, o de desarrollo, como dificultad para aprender algo nuevo o para expresar algún sentimiento.
En general, el niño quiere sentir que puede controlar ciertas situaciones y cuando se frustra, empieza a hacer una pataleta.